






Es un jazz bass del 72, le contaron al que me lo cambió que estuvo muchos años colgando en un bar español, y que el color de la pala y el cuerpo es por el humo (el que me lo cambió era inglés, lo hice a través de basschat).
Las pastillas y la electrónica no són originales, con lo que el bajo no costaba mucho (menos que un custom shop de segunda mano), y es ligerito y suena bién. En realidad no lo necesito, porque tengo otro que utilizo siempre de la misma época, y en realidad me gusta más la pastilla del puente en posición 60s, pero me flipó estéticamente.
Es curioso que hasta que tuve veintipico años odiaba los fenders y los veía bajos de viejo, y ahora són los que más me gustan.