Bueno, por fin he podido escribir un rato. Ahí va lo mío (al menos lo que puedo recordar).
Aprovecho una foto que puse en otro post, aunque algunos ya no están, y otros se han añadido.
Electown escala corta
El primer bajo de mi vida (allá por 1979 o algo así). Conseguí convencer a mi padre para que me lo comprara. 14.000 ptas. A posteriori (y ya que estaba estudiando electrónica) le tuneé todos los controles. Ya no me acuerdo ni de cómo sonaba.
Pros: El primer bajo de mi vida.
Contras: Vaya usté a saber.
Diamond Violín
Me lo dejo un colega y lo tuve un par de años. Es posible que tuviera escala de 35’, porque lo único que recuerdo de ese bajo es que me costaba bastante tocarlo por las medidas.
Pros y contras similares al anterior.
Ibanez Studio ST924
Comprado en 1981 en MAXI (Madrid), por 100.000 ptas. Este bajo ha visto mucha movida madrileña de los años 80 (mucho rockola y grabaciones/actuaciones con Sissí, Ruby, Iñaki Glutamato, Azul y Negro, etc. etc. etc.). Ha estado conmigo hasta 2008, que partió hacia tierras asturianas, a cambio de un Fender Jaco Pastorius.
Pros: Gran versatilidad de sonido, podías hacerlo sonar como te daba la gana. Posibilidad de utilizarlo en activo o pasivo. Afinación impecable. Construido como una roca y para durar (todavía está en perfecto estado).
Contras: Por decir algo, pesaba mucho. Aunque jamás me molestó.
Fender JazzBass Fretless Made in Japan
El primer frestless que tuve. Comprado (creo) sobre 1990.
Pros: Sonido Fender. Buena estética. Liviano.
Contras: Después de casi 20 años, el hardware estaba un poco hecho polvo.
Warwick Thumbass 5
Bajo más que reconocido. Tuvo que caer en mis manos sobre el 95 más o menos. Lamentablemente, no era mi estilo de bajo, y nunca llegué a hacerme del todo con el.
Pros: Sonido muy característico.
Contras: Los Warwick, o los amas, o los odias. Yo, no los amo.
Musicman StingRay 4
Comprado, creo que sobre 1998. Con este bajo encontré el nirvana bajístico. A diferencia de lo que me ocurre con los Warwick, yo SI amo los Musicman Stingray. Sin duda uno de los mejores bajos que he tenido. Ahora lo tiene nuestro compañero Bartok.
Pros: Sonido bestial.
Contras: Será porque vivo cerca del mar, pero con el tiempo, las partes metálicas acabaron un poco oxidadas.
Musicman StingRay 5
Nirvana bajístico plus. Posiblemente, el bajo con el que más me he identificado jamás. Es el que más me ha dolido perder, pero me tengo prometido (que no me oiga mi mujer), volver a conseguir uno. Mi salto definitivo a las cinco cuerdas.
Pros: Sonido bestial y en 5 cuerdas. Quinta demoledora. Definido, brillante, molloso, con pegada y con unos graves magníficos.
Contras: Que ya no lo tengo.
Line 6 Variax 705
Sorprendente bajo de Line 6, capaz de emular con éxito el sonido de los más famosos modelos (algunos comparados A/B con los originales). Estoy seguro de que cuando se depure un poco más la técnica (resultaba un poco intimidante ir con tanta cibernética encima), este tipo de instrumentos dará mucho que hablar.
Pros: Curiosamente buen mueble (sensación de tener un instrumento de calidad en las manos) y acabados. El rey de la versatilidad. Imbatible en ámbitos de estudio de grabación. Buen precio. Sonido excelente.
Contras: Quizá un poco delicado para la tralla del día a día. Me daba miedo no llevar un bajo de repuesto cuando iba a tocar lejos. No tenía posibilidad de ser usado como un bajo normal.
Line 6 Variax 700
Lo mismo que el anterior, pero en cuatro cuerdas. Lo compré como inversión cuando me enteré que habían dejado de fabricarlo.
Musicman StingRay 5 Fretless
Conseguí un mástil de ébano original Musicman, y se lo puse de vez en cuando a mi Musicman Stingray 5. No he vuelto a tocar/tener un fretless de ese calibre. Sonido como a mi gusta (Pino Palladino). Lamentablemente, ya no lo poseo.
Pros: Yo soy más de la onda de Pino Palladino que de Pastorius, por lo que esta combinación me resultaba sublime. Sonido cálido, moderno e increíble. Todos los Pros de un Musicman Stingray de cinco cuerdas.
Contras: Sniff (lagrimas).
Fender JazzBass Victor Bailey 5
Me empeñé en un Fender Jazz Bass y me compré el más bonito que existe.
Pros: Sonido Fender (reconocible en el 80 % de toda la música pop rock del siglo XX). Muy cómodo, versátil y sobre todo, precioso.
Contras: Los herrajes dorados acaban pronto en mal estado (sobre todo con la brisa marina que corre por aquí). En algunos casos tuve problemas de ruido.
Fender JazzBass Jaco Pastorius Fretless
Lo conseguí a cambio de mi Ibanez (anteriormente reseñado). Aunque vino un poco echo polvo, después de unos retoques, se quedó más que decente. Me sorprendió la suavidad del mástil y lo cantarín que resultaba. Lástima que no fuera de cinco cuerdas.
Pros: Super cantarín. Sonidazo increíble.
Contras: Hubo que darle un serio repaso para que se pusiera a la altura. Pienso que Fender podría haberselo currado un poco más. El estuche original era muy malo.
G&L Tribute 2500
Un bajo de gama media (unos 600 €) con una calidad más que decente. Una especie de híbrido entre un Musicman Stingray y un Fender Jazz bass. El mío llegó con unas pastillas Bartollini y un previo EBS (¿?).
Pros: Excelente relación calidad/precio. Muy buen sonido (Stingray/Jazzbass). Muy buena construcción. Bajo totalmente recomendable.
Contras: Para mi gusto, el mástil un poco grueso.
Sabrafen Musicman/JazzBass Fretless 5
Un invento que compré, que traía el mástil fretless (ébano) de Musicman, un cuerpo genérico tipo Jazzbass, pastillas EMG, un previo desconocido y herrajes musicman.
Como fretless no terminó nunca de convencerme, pero cuando intercambié los mástiles de mi Stingray y este, la cosa cambió. Ahora lleva un mástil de grafito Status con trastes.
Pros: Muy buen sonido y muy cómodo. Excelente mástil (el de grafito), aunque con un tacto curioso.
Contras: Un poco pesado. Es un custom sin padre ni madre (sin marca). Es el objeto de mis tentativas lutherianas (ahora le he calzado una pastilla Roland SK-2B).
Harley Benton Beat Bass
El bajo de la risa, me costo 172 € (estuche incluido) en Thomann. Me lo compré para usarlo con mi grupo de los Beatles (Liverpool), y me ha dado un resultado excelente. Está super amortizado. Ahora le he puesto unas cuerdas de entorchado plano para disponer de más gamas de sonido. Actualmente, es el único bajo de cuatro cuerdas que poseo.
Pros: Precio increíble, estética Beatle, buen sonido, poco peso.
Contras: Cabecea mucho. Como le quites todas las cuerdas, se cae el puente (y entonces a ver quien lo quinta).
Sadowsky Metro M5 24
La joya de mi corona. Conseguido a principios de este año. Un sueño hecho realidad.
Pros: Construcción impecable. Sonido maravilloso. Absoluto peso pluma. Increíblemente silencioso.
Contras: La separación entre cuerdas (19 mm.) me ha permitido desarrollar nuevas técnicas, pero al mismo tiempo ha complicado un poco la adaptación (nada insuperable). Precio muy elevado (aunque lo vale).
No importa lo rápido o pirotécnico que puedas ser. Te van a valorar por el groove que puedas crear.